En la travesía de la existencia humana, nos encontramos con una serie de momentos que desencadenan un profundo cambio en nuestra percepción y sentimientos. A menudo, atribuimos estos cambios a experiencias específicas que, sin previo aviso, alteran el curso de nuestras vidas. Durante mucho tiempo, podemos transitar por este nuevo camino sin plena conciencia de la fuerza subyacente que guía cada giro y revuelo.

El proyecto La Caja De Los Sueños, relata una parte significativa de mi propia vida. A través de él, comparto cómo viví de manera sincronizada experiencias que me condujeron hacia un cambio inconsciente e inquieto en la dirección que tomaba mi existencia.

La vida, en su inagotable fluir, nos invita a sumergirnos en un proceso continuo de crecimiento y autorreflexión. Al hacerlo, podemos abrazar con gracia los cambios que se presentan en nuestro camino, comprendiendo que, en última instancia, son oportunidades para evolucionar y florecer como seres humanos conscientes. La intención de este proyecto es el de explorar juntos el poder de la sincronía y el discernimiento, revelando cómo la vida, en su misteriosa danza, nos guía hacia un estado más profundo de serenidad y comprensión.

Este es un viaje emocional y reflexivo, donde las experiencias se entrelazan con la espiritualidad y la sabiduría interior, revelando la belleza y la profundidad de la vida en su más puro y sereno esplendor.

Nací en 1970 en Guadalajara, Jalisco, México, y mi infancia transcurrió en circunstancias bastante comunes. Desde una edad temprana, me caractericé como un niño inquieto y curioso, aunque con tendencias introvertidas. Sin embargo, mi vida tomó un giro particular debido a la diferencia de edad entre mi madre y yo, que son solo 16 años. Aunque en aquellos tiempos podría haberse considerado una situación normal, pronto descubrí que mi madre era una mujer excepcional en muchos sentidos.

Mi padre, una figura amorosa y serena, me guio a lo largo del sendero de la vida con gentileza. Desde temprano, me inculcó valores fundamentales como el respeto y la ética. Era un hombre aparentemente satisfecho con su vida y compartió conmigo lo mejor de sí mismo.